La mañana del sábado 3 de octubre el joven Samuel Ulloa, de 19 años, salió de su casa a trabajar, junto a su compañero de labores, Nelson Javier Osoria. Eran alrededor de las 6:00.
Cuando aún no iba muy lejos, Samuel advirtió que un fuego de gran magnitud afectaba la planta de gas licuado de petróleo Coopegas, que colinda con la parte trasera de su vivienda, donde se encontraban durmiendo su esposa y su hijo, de meses de nacido.
Ambos jóvenes se devolvieron, y mientras alertaban a los vecinos, se enfrentaron a las llamas que ya arropaban la casa de Samuel, en la comunidad de Limonal Arriba del municipio de Licey al Medio, en Santiago.
Tras una labor heroica junto a su amigo de 25 años, Samuel logró rescatar con vida, aunque con múltiples quemaduras, a su pareja, Grisell Santos Padilla, de 15 años, y a su niño Braylin, quien murió horas después.
Vista del bebé Braylin Ulloa, fallecido tras la explosión en la planta de gas el pasado 3 de octubre. ( FUENTE EXTERNA )
Cuatro días habían pasado del suceso que mantiene en luto a toda la comunidad, cuando Samuel perdió a su esposa, y 24 horas después a su compañero, producto de las lesiones que sufrieron durante el incendio.
Este sábado 17 al mediodía Samuel Ulloa también falleció, luego de dos semanas ingresado en el Hospital José María Cabral y Báez. El 90 % de su cuerpo se quemó, según informó el doctor Bernardo Hilario Reyes, director del centro asistencial.
Con el fallecimiento de Samuel Ulloa suman 11 las víctimas mortales del siniestro.