El área de baja presión que se encuentra al norte de Puerto Rico es posible que se convierta en un sistema tropical que podría tener fuerza de huracán cuando se esté acercando a las Bahamas y la costa este de la Florida, y los residentes deben estar preparados, dijo el subdirector encargado del Centro Nacional de Huracanes (NHC), Michael Brennan.
Florida podría verse afectada por lluvias intensas, inundaciones y un fuerte oleaje por posible depresión tropical. Foto: NOAA Brennan, dijo este domingo durante una actualización sobre el sistema que las personas en esas zonas deben cerciorarse de estar preparadas, saber si se encuentran en áreas de inundaciones y tener listo todos sus suministros.
“Llenar el tanque del auto con gasolina, tener dinero en efectivo, sus medicinas, alimentos y agua”, indicó. El NHC detalló en su boletín de la 7 pm que las personas en la costa sureste de EEUU, la costa este de la Florida, el centro y noroeste de las Bahamas deben observar el desarrollo de “este sistema como una tormenta tropical o un huracán, y se podrían emitir alertas temprano el lunes para estas áreas”.
La probabilidad de formación del sistema es de 80% a 48 horas y de 90% a cinco días.
Si se formara una tormenta tropical se llamaría Nicole y sería la décima catorce de la temporada de huracanes en el Atlántico que inició el 1 de junio y finaliza el 30 de noviembre.
Brennan explicó que la baja presión tiene gran probabilidad de convertirse en un sistema subtropical o tropical posiblemente en dos días y el ojo está tratando de formarse al norte de La Española y de Puerto Rico.
Cuando esté cerca de las Bahamas y la costa este de la Florida el miércoles o jueves el NHC tendría mayor precisión en cuanto a si el sistema tendrá vientos de 65 mph o si alcanzará vientos huracanados.
“Uno de los aspectos que queremos enfatizar es que es un sistema muy grande y es muy probable que veamos impactos en una zona de gran tamaño independientemente del lugar a dónde se dirija (…) Tendremos una zona de vientos muy grande en la costa este de EEUU, incluyendo la costa este de la Florida, las Carolinas y Georgia por varios días”, puntualizó.
El directivo del NHC informó que el sistema afectaría con fuertes vientos, lluvias intensas, inundaciones, erosión de playas, alto oleaje y poderosas corrientes marítimas. Posiblemente provocaría olas de más de 20 a 25 pies de altura, arrojaría de 8 a 10 pulgadas de lluvia y durante un periodo largo. Incluso se podrían solicitar evacuaciones si existiera el riesgo de inundaciones graves, advirtió.
John Morales, meteorólogo de NBC6, dijo que el estado de Florida ha sido golpeado nueve veces por sistemas tropicales este mes durante los últimos 170 años, aproximadamente un cinco por ciento de probabilidad en cualquier año.
“Si bien es probable que la baja sea, en el peor de los casos, una tormenta subtropical o tropical, hay uno o dos modelos que pronostican un huracán en noviembre para el sur de la Florida”, expresó. Siete de esos nueve procedían del Caribe occidental y el Golfo de México. Eso hace que el sistema en desarrollo de esta semana, en caso de que se consolide y golpee a la Florida, sea bastante raro, dijo Morales.
“Pero lo que es excepcionalmente raro es que la península de Florida sea golpeada por un huracán, independientemente de dónde se haya originado, en el mes de noviembre. Solo hay un huracán registrado que azotó la península en noviembre, que se remonta a 1851: el llamado huracán Yankee que azotó Miami Beach (cerca de la actual Bal Harbour) el 4 de noviembre de 1935. ¡Era de categoría 2!”, puntualizó.
Preocupación en zonas inundadas por Ian La División de Manejo de Emergencias de Florida (FDEM) informó que está monitoreando la trayectoria del sistema Invest 98L y su posible fortalecimiento e impacto en la Florida. También pidió a los residentes tomar las debidas precauciones.
“A medida que la División continúa apoyando a las comunidades en su recuperación del huracán Ian, ahora estamos monitoreando de cerca el 98L”, dijo el director de FDEM, Kevin Guthrie. “Es fundamental que los floridanos revisen sus planes de preparación para desastres y sigan todas las instrucciones de los funcionarios locales en previsión de posibles impactos”.