El Ministerio de Trabajo mediaría en posibles conflictos que puedan generarse en el ámbito laboral por la exigencia de la tarjeta de vacunación contra COVID-19 a los trabajadores en las empresas donde laboran.
El ministro Luis Miguel De Camps dijo que esa institución tiene la misión de “construir la facilitación de consenso”, entre empleadores y trabajadores en cualquier situación de desacuerdo que se presente.
“El Código de Trabajo, la Constitución y el decreto 522-06 de Seguridad y Salud en el Trabajo establece la obligación de los empleadores de activar y de los trabajadores de participar en los comités de salud y seguridad en el trabajo. Afortunadamente gracia a estos comités estas dificultades que algunos han señalado van a ser solucionadas porque juntos, trabajadores, gobierno, empleadores vamos a salir de este impasse”, expresó el ministro.
Señaló que el gobierno está comprometido con buscar la salud de los trabajadores y de la economía, y que el ministerio de Salud Pública tiene competencia para emitir una resolución, mediante la cual se exigirá la presentación de la tarjeta de vacuna.
Empresas pueden exigirla
“Las empresas están en su derecho y en el deber de exigir la tarjeta de vacuna contra el COVID-19 a sus empleados, aunque la inoculación no sea obligatoria”. Así lo afirmó el presidente de Confederación Autónoma Central Clasista, Gabriel del Río Doné y dijo que quienes no se vacunan deben entender que se trata de un asunto de salud colectiva y por tanto deberían entonces quedarse en sus casas. “Usted está en una sociedad en la que quiere convivir con los demás, pues póngase en condiciones de no afectar a los demás y entonces yo creo que sí, que el gobierno debe exigir que todo el mundo se ponga su vacuna, que sea obligatoria o no eso es un problema de conciencia”.
De Camps y Del Río ofrecieron sus declaraciones luego de participar en la misa por el 41 aniversario del Instituto Nacional de Formación Técnico Profesional (Infotep).