Alexis Medina y Fernando Rosa, imputados en el entramado de corrupción administrativa desarticulado a final del año pasado con la Operación AntiPulpo, deberán seguir recluidos en prisión.
Tras conocer un recurso de apelación interpuesto por los acusados, la Primera Sala de la Corte de Apelación del Distrito Nacional, presidida por el juez Rafael Báez, dispuso este jueves que se mantengan cumpliendo la referida medida de coerción en el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo-Hombres.
Medina y Rosa presentaron el recurso, tras el Tercer Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, tribunal control del caso, ratificarles a los acusados la prisión preventiva durante una audiencia de revisión de la medida de coerción.
Los encartados buscaban que el tribunal ordenara su libertado o le variaran la medida por una menos gravosa.
Sobre el fallo del tribunal, el titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), Wilson Camacho, indicó que esta decisión conforme al derecho y reiteró que tiene una acusación sólida.
“Ocho jueces han dicho que el Ministerio Público tiene un proceso blindado y solo la defensa no ha entendido eso”, dijo.
A Medina se le atribuye ser el principal acusado de dirigir el entramado de corrupción que se valía de su vínculo familiar directo con el poder político, en calidad de hermano del entonces presidente Danilo Medina, para enriquecerse a costa de los recursos de los contribuyentes.
Junto a Medina y Rosa son procesados Aquiles Alejandro Christopher, exdirector de fiscalización de obras de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (Oisoe); Francisco Pagán Rodríguez, exdirector de la Oisoe; Julián Esteban Suriel Suazo; José Dolores Santana Carmona y Wacal Vernavel Méndez Pineda, quienes cumplen prisión preventiva.
Mientras que contra los procesados Carmen Magalys Medina z, también hermana de Alexis Medina Sánchez, y del expresidente Danilo Medina, y a Lorenzo Wilfredo (Freddy) Hidalgo Núñez, exministro de Salud, pesan arresto domiciliario.
Carmen Magalys e Hidalgo Núñez también tuvieron que pagar una fianza de 10 millones de pesos mediante contrato y se mantienen con impedimento de salida del país.
El encartado Domingo Santiago Muñoz quedó en libertad con la obligación de presentarse de manera periódica ante el procurador fiscal que lleva la investigación del caso Pulpo.
Las medidas de coerción fueron impuestas por el la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente en diciembre del pasado año.