El presidente de la República, Luis Abinader, ordenó la suspensión y sometimiento a la justicia de los agentes que mataron a Elizabeth Muñoz y Joel Díaz, una pareja de evangélicos que fue acribillada la noche del martes mientras salía de una iglesia en Villa Altagracia.
El mandatario se mostró indignado y dijo que en su gobierno, la vida humana es sagrada.
“He dado instrucciones inmediatas al ministro de Interior y Policía para la cancelación de estos agentes y para que sean enviados a la justicia, donde deberán responder de sus actos”, dijo el mandatario durante un discurso desde el Palacio Nacional.
Según la Policía Nacional, los agentes que dispararon contra el auto donde se encontraba la pareja y otras dos personas, son Victorino Reyes Navarro, el sargento Domingo Perdomo Reyes, los cabos Norkys Rodríguez Jiménez y Ángel de los Santos, así como también los rasos Anthony Castro Pérez y Juan Manuel Ogando Solis.
También, el mandatario se comunicó con las familias de las víctimas a quienes dijo que tendrán asistencia inmediata.
“No podemos deshacer el daño causado, pero sí les puedo asegurar que se hará justicia”, dijo el jefe de Estado.
La rueda de prensa sería, según la agenda de la Presidencia, para hablar de la economía y el empleo, “pero la indignación que tengo y tiene el pueblo dominicano, me obligan a referirme al homicidio de una pareja de pastores recién casados, inocentes en Villa Altagracia”, dijo Abinader en tono molesto.
Estuvo acompañado por Jesús Vásquez, ministro de Interior y Policía; José Paliza, administrativo de la Presidencia; Milagros Germán, vocera de la Presidencia, y Antoliano Peralta, consultor jurídico del Poder Ejecutivo.