Los presidentes de ambos países mantuvieron este jueves la que ha sido la primera conversación desde que Joe Biden fue investido el pasado 20 de enero
El presidente surcoreano, Moon Jae-in, dijo hoy que ha acordado en una conversación telefónica con su homólogo estadounidense, Joe Biden, “potenciar aún más la alianza” entre ambos países para lograr la paz en la península de Corea.
Ambos mandatarios mantuvieron este jueves la que ha sido su primera conversación desde que Biden fue investido el pasado 20 de enero.
“El presidente Biden y yo nos hemos comprometido a potenciar aún más la alianza entre la República de Corea (nombre oficial del país) y EEUU, una alianza que se basa en valores compartidos”, escribió Moon en sus perfiles en redes sociales.
Moon añadió sobre la alianza entre ambos países que “siempre vamos a estar juntos mientras trabajamos por la paz en la península de Corea y abordamos los desafíos globales”.
“He recibido con los brazos abiertos el ‘retorno de Estados Unidos’ en medio de crecientes desafíos globales como la COVID-19, el cambio climático y la polarización económica”, añadió en referencia al lema popularizado tras la toma de posesión de Biden y que pretende contrastar con el “EE.UU. primero” del expresidente Donald Trump.La gente mira una transmisión de televisión que muestra un archivo de un informe de noticias sobre Corea del Norte disparando dos proyectiles, posiblemente misiles, al mar entre la península de Corea y Japón, en Seúl, Corea del Sur, el 31 de octubre de 2019. REUTERS / Heo Ran
La Administración Moon ha expresado en varias ocasiones su beneplácito con la elección de Biden tras cuatro años en los que Trump cargó de tiranteces la relación con Seúl, uno de los principales aliados de Washington en Asia, realizando comentarios negativos hacia el país o amenazando con retirar sus tropas del sur de la península.
Los dos presidentes ya conversaron por teléfono el pasado 12 de noviembre, poco después de la victoria de Biden en las elecciones estadounidenses, y acordaron entonces “trabajar juntos” para resolver el problema que plantea el programa nuclear y de misiles de Corea del Norte.
El diálogo sobre desnuclearización con Pyongyang se encuentra estancado desde la cumbre de Hanói de febrero de 2019, en la que Washington se negó a levantar sanciones por considerar insuficiente la oferta de desarme del régimen.
Tras el fracaso de la administración Trump para resolver el conflicto, el dictador norcoreano, Kim Jong-un, instó recientemente al nuevo Gobierno de Biden a proponer nuevas alternativas para retomar el diálogo advirtiendo que Pyongyang prepara nuevas pruebas de armas.
Muchos expertos creen que el régimen norcoreano podría retomar pronto los lanzamientos de misiles de largo alcance o las pruebas nucleares si Washington no hace ademán de entablar nuevas conversaciones.El dictador norcoreano, Kim Jong-un. EFE/EPA/KCNA/Archivo
Por otra parte, el ejército norcoreano ha incrementado el número de unidades en sus fuerzas estratégicas, rama encargada de supervisar el programa de misiles, y también las dedicadas a operaciones especiales, según el Libro Blanco de Defensa publicado hoy por el Gobierno sureño.
Son los principales cambios en este volumen bianual que publica el Ministerio de Defensa surcoreano y que evalúa las capacidades y activos militares de Corea del Norte.
Según el texto, Corea del Norte ha aumentado a 13 el número de brigadas bajo el mando de la Fuerza Estratégica de Cohetes con respecto a las 9 que existían en 2018.
Este incremento vendría dado por el nuevo armamento que Corea del Norte ha testado en los dos últimos años y que ya tendría operativo, como los sistemas tácticos (de corto alcance) conocidos como KN-23, KN-24 y KN-25.
Corea del Norte también ha fortalecido sus equipos de operaciones especiales y elevado su rango, según el Libro Blanco.Misiles intercontinentales Hwasong-15 mostrado durante el último desfile militar en Corea del Norte. (Photo by – / KCNA VIA KNS / AFP) /
“La unidad de combate especial ha llevado a cabo simulacros de ataque utilizando réplicas de las principales instalaciones estratégicas de Corea del Sur y ha modernizado sus equipamientos”, explica el libro.
En cuanto a sus reservas de plutonio para fabricar armas nucleares, la evaluación del Gobierno surcoreano permanece sin cambios con respecto a 2018; Seúl estima que el régimen norcoreano posee unos 50 kilos, suficiente para armar una decena de bombas.
Del mismo modo, se estima que su capacidad para miniaturizar una carga nuclear y montarla sobre un misil ha alcanzado un nivel “considerable”.