En ambos lugares se concentran la mayor cantidad de casos en el país
La alcaldesa de San Francisco, London Breed, declaró oficialmente el estado de emergencia por el auge de contagios de la viruela del mono en su ciudad, una movida similar a la que se llevó a cabo en esa misma ciudad en la década del 80 en plena crisis por los contagios de VIH.
En la ciudad hasta el momento se han detectado 261 infectados con la viruela del mono, que representan el 30% de los casos de todo el estado de California. Se ha visto a personas hacer colas por horas para conseguir una dosis de la vacuna, que escasea en todo el país. La localidad tuvo que cerrar sus centros de vacunación a comienzos de semana porque se habían quedado sin dosis, explicando que sólo habían recibido 7.800 dosis, de las 35.000 que le habían pedido al gobierno federal. Las autoridades indicaron que para la semana próxima les prometieron unas 4.200 dosis más.
Como ocurre en todo el mundo, en este momento la población con el mayor número de contagios en San Francisco son los hombres gay. Durante la reunión del consejo de la ciudad la semana pasada, decenas de miembros de la comunidad LGBTQ+ se presentaron a dar las quejas por la falta de ayuda y de información oficial proveniente del departamento de salud de San Francisco. Como respuesta ha llegado esta declaración, que le permite a la ciudad liberar fondos para combatir la enfermedad.
“San Francisco demostró durante la pandemia del COVID 19 que la acción temprana es esencial para proteger la salud pública”, decía en rueda de prensa la alcaldesa Breed.
EMERGENCIA EN NUEVA YORK
Por su parte, en el estado de Nueva York, donde ya se confirmaron más de 1.400 casos, fue declarado en emergencia. Las autoridades locales señalaron a la enfermedad como una amenaza inminente para la salud pública.
“Esta declaración significa que los departamentos de salud locales que participan en las actividades de respuesta y prevención podrán acceder a un reembolso estatal adicional, una vez que se hayan maximizado otras fuentes de financiación federales y estatales, para proteger a todos los neoyorquinos y, en última instancia, limitar la propagación de la viruela del mono en nuestras comunidades”, aseguraba en un comunicado de prensa la doctora Mary Bassett, comisionada de salud del estado de Nueva York.
En los Estados Unidos en los últimos dos meses se han comprobado 4.600 casos de la viruela del mono, la mayor parte de los cuales se encontraron en la ciudad de Nueva York. Mientras se rumorea que el gobierno federal estaría a punto de declarar el estado de emergencia por la enfermedad, algunas autoridades locales están tomando medidas por su cuenta.
Cabe destacar que hasta ahora no se contabilizado ni una sola muerte relacionada a esta enfermedad en el país.
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