Los Mets de Nueva York liberaron al segunda base Robinson Canó antes de la doble cartelera del domingo contra los Filis de Filadelfia.
La movida se produce una semana después de que Canó, que se desplomaba, fuera designado para asignación a pesar de que le quedaban casi $45 millones en su contrato.
Los Mets anunciaron la noticia en sus notas previas al juego y luego de que el manager Buck Showalter se reuniera con los reporteros antes de los juegos del domingo.
Canó, de 39 años, se quedó fuera la temporada pasada mientras cumplía su segunda suspensión por drogas para mejorar el rendimiento. Bateó .195 (8 de 41) con un jonrón, tres carreras impulsadas y un mísero OPS de .501 en 43 apariciones en el plato para los Mets, líderes de la División Este de la Liga Nacional.
Canó tiene un promedio de bateo de por vida de .302 con 335 jonrones, 1,305 carreras impulsadas y OPS de .842 en 17 temporadas. Tiene 2.632 hits, incluidos 571 dobles. Los Mets le deben a Canó $44,703,297 del resto del contrato de $240 millones por 10 años que firmó con Seattle. Ha perdido $35,741,935 debido a las dos suspensiones por drogas.
Ahora que los Mets lo dieron de baja, un equipo podría firmarlo por una parte prorrateada del mínimo de $700,000 esta temporada y también pagar el mínimo de $710,000 en 2023.
En un acuerdo que también anotó al cerrador Edwin Díaz, los Mets enviaron a cinco jugadores a Seattle en diciembre de 2018, incluido el preciado prospecto de campo Jarred Kelenic, la selección general número 6 en el draft amateur de 2018. New York acordó asumir los $100 millones restantes en los últimos cinco años del contrato de Canó en ese momento.
Canó terminó jugando solo 168 juegos para los Mets, bateando .269 con 24 jonrones, 72 carreras impulsadas y un OPS de .765.
