“Lo que ocurrió ayer en el Capitolio de Estados Unidos fue una insurrección contra Estados Unidos, incitada por el presidente”, dijo en un comunicado el líder de la bancada en el Senado, Chuck Schumer. Horas después, Nancy Pelosi, su homóloga en la Cámara Baja, se expresó en la misma línea
Los líderes de las bancadas demócratas en ambas cámaras del Congreso de Estados Unidos llamaron este jueves al vicepresidente Mike Pence a invocar la Vigesimoquinta Enmienda a la Constitución para destituir inmediatamente al presidente, Donald Trump, diciendo que si no actúa, el Congreso deberá realizar un juicio político al mandatario.
El líder de los demócratas en el Senado, Chuck Schumer, y su homóloga en la Cámara Baja, Nancy Pelosi, emitieron sendas declaraciones en esa línea a lo largo del día.
“Lo que ocurrió ayer en el Capitolio de Estados Unidos fue una insurrección contra Estados Unidos, incitada por el presidente”, dijo Schumer en un comunicado. “Este presidente no debería ocupar el cargo ni un día más”.
En concreto, la enmienda confiere el poder al vicepresidente y al gabinete del mandatario a removerlo del poder si consideran que no está en condiciones de hacer su trabajo.
“Cuando el vicepresidente y la mayoría de los principales funcionarios de los departamentos ejecutivos o de cualquier otro cuerpo que el Congreso autorizara por ley trasmitieran al presidente pro tempore del Senado y al presidente de la Cámara de Representantes su declaración escrita de que el presidente está imposibilitado para ejercer los poderes y obligaciones de su cargo, el vicepresidente inmediatamente asumirá los poderes y obligaciones del cargo como presidente en funciones”, indica el texto de la Vigesimoquinta enmienda.Foto de la irrupción de los seguidores de Donald Trump en el Capitolio de EEUU
“Si el vicepresidente y el gabinete se niegan a levantarse”, expresó, el Congreso debe volver a reunirse para acusar al presidente”.
Pelosi, por su parte, dijo que remover a Trump es “una emergencia de la magnitud más alta”. Además, describió a Trump como “una persona muy peligrosa que no debería continuar en el cargo”.
De esta manera, Schumer y Pelosi se convirtieron en los funcionarios más prominentes en llamar a que Trump sea cesado de sus funciones por su rol en los disturbios que tuvieron lugar ayer en Capitolio y sus inmediaciones.
Además de los congresistas, numerosos demócratas y hasta un puñado de republicanos se han emitido declaraciones públicas del mismo tenor. Entre ellos se cuentan los representantes Charlie Crist y Ted Lieu. “La 25ª Enmienda permite la destitución de un Presidente. Es hora de destituir al presidente”, tuiteó Crist.
Otros 17 de sus colegas, todos miembros del comité judicial, firmaron una carta con el mismo contenido.
La congresista Ilhan Omar fue un paso más allá y anunció el miércoles que ya se encontraba redactando artículos de juicio político. No podemos permitir que permanezca en el cargo, es una cuestión de preservar nuestra República y debemos cumplir con nuestro juramento”, escribió en su cuenta de Twitter.
Miembros de la sociedad civil y hasta el sector privado replicaron los llamados. “Incitar a un golpe tiene que justificar un juicio político”, escribió en Twitter el presidente de la Asociación Nacional para el Progreso de las Personas de Color (NAACP), Leon Russell.
También lo hizo el bufete de abogados Cromwell & Moring, que representa a numerosas de empresas parte del Fortune 500. En su comunicado, instó a otros abogados a que hicieran lo mismo, diciendo que “cuando se trata de defender nuestra Constitución y nuestro sistema legal, tenemos un deber especial y una perspectiva excepcional”.
Trump ya enfrentó un juicio político durante su administración. Fue absuelto en febrero de 2020 por el Senado controlado por los republicanos tras un proceso dirigido por la Cámara controlada por demócratas, quienes lo acusaron de intentar presionar a Ucrania para que investigara a Biden y a su hijo Hunter.