Por primera vez en sus 234 años de historia, la Cámara respaldó una resolución “para dejar vacante el cargo de presidente” con 216 votos a favor y 210 en contra
El republicano Kevin McCarthy fue destituido este martes como líder de la Cámara Baja de Estados Unidos tras una moción en su contra presentada por un miembro de su propio partido en represalia por concesiones efectuadas a los demócratas.
La resolución, introducida el lunes por el ultraconservador Matt Gaetz, fue aprobada por 216 votos a favor y 210 en contra, haciendo historia al ser la primera vez que una moción de este tipo sale adelante.
McCarthy será sustituido de forma interina por el también republicano Patrick McHenry, representante del décimo distrito de Carolina del Norte.
Gaetz, opuesto desde el principio a la nominación de McCarthy como líder, había amenazado durante meses con activar el proceso para sacarlo del puesto y esa amenaza se aceleró el fin de semana pasado, después de que McCarthy se apoyara en votos demócratas para sacar adelante la ley que amplió durante 45 días la financiación de la Administración en temas clave y evitó así un cierre del Gobierno.
Matt Gaetz forma parte del “Freedom Caucus” (Caucus de la libertad), el ala del Partido Republicano más afín al ex presidente Donald Trump (2017-2021) (REUTERS/Jonathan Ernst)
Aunque McCarthy avanzó este martes que confiaba en tener el apoyo suficiente para seguir al frente, su suerte comenzó a torcerse cuando el líder de la minoría demócrata, Hakeem Jeffries, instruyó a los miembros de su bancada a votar para revocarlo.
Desde las elecciones de medio mandato del pasado noviembre, los conservadores tienen en esa cámara 221 escaños y los demócratas 212. La moción necesitaba ser aprobada por mayoría simple.
Activar la moción de censura requería solo que la impulsara un legislador, ya sea demócrata o republicano, y que esa votación alcanzara la mayoría simple. Como hay dos vacantes en la Cámara de Representantes, esa cifra se situaba en 217 votos.
Solo otros dos presidentes de la Cámara de Representantes en el último siglo han sido sometidos a una moción en su contra, ambas sin éxito: contra los también republicanos Joseph Cannon en 1910 y John Boehner en 2015. En esa última ocasión no se llegó a someter a voto, pero su presentación fue un detonante para la dimisión de Boehner meses después.
Las reglas de la Cámara de Representantes establecen que es el propio presidente de la misma quien debe elaborar una lista con sus posibles sustitutos en caso de que su puesto se declare vacante. Ese listado se hace público solo en caso de que esa situación se cumpla y la persona elegida actúa de forma interina hasta la elección del nuevo líder.
McCarthy será sustituido de forma interina por el también republicano Patrick McHenry, representante del décimo distrito de Carolina del Norte
269 días en el cargo
Quince intentos necesitó en enero Kevin McCarthy para ser elegido líder de la Cámara de Representantes, ante las negativas de los radicales de su propio partido, los mismos que este martes lo han bajado de su puesto tras unos meses de tira y afloja en los que no ha logrado dominarlos.
McCarthy se convirtió este martes en el presidente más breve de este hemiciclo con permiso de Theodore M. Pomeroy, que en 1869 fue “Speaker” por un día, por temas burocráticos. Ha sido líder un total de 269 días, en los que ha vivido sometido a las presiones de los republicanos radicales agrupados bajo el llamado “Freedom Caucus” (El Caucus de la Libertad), también llamados republicanos MAGA.
En junio logró que no le hicieran una moción de destitución, pese al enfado de los radicales porque, cuando EEUU estaba al borde de un incumplimiento de su deuda soberana, el “Speaker”, como se conoce en inglés al presidente de la Cámara Baja, llegó a un acuerdo con Biden para elevar el techo de deuda.
Una elección compleja
Pese a que no convencía a todos en su propio partido, McCarthy era el candidato más predecible entre los republicanos para convertirse en el presidente de la Cámara Baja de EEUU tras años liderando el partido allí. Pero los radicales lo consideraban demasiado “moderado” y acabó haciendo historia, pues hacía un siglo que un “Speaker” no era elegido en la primera votación. Tuvo que someterse a quince.
Las diferencias entre sus partidarios -agrupados bajo la etiqueta “Only Kevin” (Solo Kevin)- y sus detractores -”Never Kevin” (Kevin jamás)” – reflejó las rencillas internas del partido, líder en la Cámara de Representantes desde las elecciones de medio mandato de noviembre de 2022.
Donald Trump junto a Kevin McCarthy (REUTERS)
McCarthy nunca ha sido una figura de pleno consenso: en 2015, con los republicanos liderando la Cámara, renunció por sorpresa a posicionarse en la cima de su partido en ese hemiciclo por falta de apoyos internos suficientes.
Nacido en California hace 58 años, ejerció como líder de la minoría republicana en la Cámara Baja desde 2019, con la demócrata Nancy Pelosi como presidenta. Desde 2014 y hasta entonces, con los republicanos dirigiendo la Cámara y John Boehner y Paul Ryan como “Speakers”, ocupó el cargo de “número dos” de esta cámara.
En agosto de 2014 cuando asumió ese puesto hizo historia al alzarse con él tras solo siete años y medio en activo dentro de los pasillos del Capitolio.
Amigo de Trump
Pese a que los MAGA tachan de “moderado” al representante por California, nieto de un ganadero e hijo de un bombero que creció en una familia de clase trabajadora, la relación de McCarthy con Trump y sus pensamientos es estrecha.
Hasta el punto de que el propio Trump no ha sugerido apoyar la propuesta de Gaetz de destituirlo, aunque elogió a ambos miembros del Congreso en un acto celebrado este fin de semana.
McCarthy trabajó duro para conseguir el respaldo de Trump y cultivó una relación cercana mientras era presidente. Fue el primer líder republicano en visitar la mansión de Mar-a-Lago (Florida) después de que Trump abandonara la Casa Blanca, unas semanas después del ataque del 6 de enero de 2021 al Capitolio.
Aunque no funcionó hasta la decimoquinta votación, aquellos días de enero Trump animó a los MAGA a respaldar a McCarthy, un apoyo que no le ha bastado para sobrevivir en su cargo.