Luego de que el alero de Los Ángeles Lakers, LeBron James, lograra el sábado por la noche otra marca histórica en su carrera profesional tras superar al ex escolta Kobe Bryant (33.643 puntos) como tercer máximo encestador de todos los tiempos de la NBA, recibió la felicitación por parte de la leyenda del básquetbol. Ese mensaje, publicado en su cuenta de Twitter, fue el último de Kobe, quien murió este domingo en un accidente de helicóptero.
“Continuar llevando al baloncesto cada vez más alto con la figura de KingJames. Respeto mucho a mi hermano (hash) 33644”, escribió Kobe.
Mientras que James, en homenaje a Bryant, escribió en sus zapatillas “Mamba 4 Life”, que utilizó durante el partido que ya es histórico y que los Lakers perdieron por 108-91 ante los Sixers de Filadelfia, la ciudad donde nació Bryant.
A los 41 años, Bryant murió en un accidente aéreo. La leyenda de la NBA viajaba con otras cuatro personas en su helicóptero privado Sikorsky S-76 cuando se desplomó sobre la ciudad de Calabasas, ubicada en el condado de Los Ángeles, California.
Tras el accidente, se produjo un incendio: el personal de emergencia respondió, pero se informó que nadie a bordo sobrevivió.
Bryant edificó una impactante carrera en la liga de básquetbol más competitiva del mundo, al punto de haber sido comparado con Michael Jordan. El escolta se erigió como una leyenda de Los Ángeles Lakers, donde ganó cinco anillos de la NBA, además de obtener dos medallas de oro en Juegos Olímpicos con la camiseta del seleccionado estadounidense.
Con la marca de LeBron, ahora el debate se agranda sobre qué Laker fue el más grande entre ambos jugadores, “The King” o “Black Mamba”.
Pese a que Lebron lo superó en puntos, Bryant durante su carrera cosechó dos títulos más de la NBA.
James había llegado al partido con la falta de 18 puntos para batir los 33.643 puntos de Bryant y lo consiguió al completar una penetración y canasta cuando aun quedaban 7:22 minutos por jugarse del tercer periodo. Finalmente, terminó el partido con 29 puntos. Al conocerse la nueva marca histórica, en la pantalla de video del Wells Fargo Center de Filadelfia, los seguidores de los Sixers, puestos en pie, le tributaron una gran ovación.
James saludó a los aficionados y los Sixers también mostraron un video de los 10 mejores encestadores en la historia de la NBA.
El poema del retiro
En noviembre de 2015, Kobe Bryant anunció mediante una carta publicada en el sitio The Players Tribune su retiro de la actividad profesional. El cinco veces campeón de la NBA lo hizo mediante un texto en forma de poema.
A continuación, el texto completo:
QUERIDO BALONCESTO
Desde el momento
Que empecé formar balones con las medias de mi padre
Y a disparar imaginarias
Canastas ganadoras
En el Great Western Forum
Supe que una cosa era real:
Me enamoré de ti.
Un amor tan profundo que te di todo –
Desde mi cuerpo & mente
Hasta mi espíritu & alma.
Como un niño de seis años
Profundamente enamorado de ti
Nunca vi el final del túnel.
Solo me vi a mí mismo
Salir corriendo desde uno.
Y entonces corrí.
Subí y bajé en la cancha
Persiguiendo cada balón suelto por ti.
Me pediste mi esfuerzo
Te di mi corazón
Porque vino con muchísimo más.
Jugué a pesar del sudor y el dolor
No porque el reto me llamó
Sino porque TÚ me llamaste.
Porque eso es lo que uno hace
Cuando alguien te hace sentir
Tan vivo como tú me hiciste sentir.
Le diste a un niño de seis años su sueño de ser Laker
Y siempre te amaré por eso.
Pero no puedo amarte obsesivamente durante mucho más.
Esta temporada es todo lo que me queda para dar
Mi corazón puede resistir los golpes
Mi mente puede soportar el esfuerzo
Pero mi cuerpo sabe que es momento de decir adiós.
Y eso está bien.
Estoy listo para dejarte ir.
Quiero que lo sepas ahora
Así ambos podemos saborear cada momento que nos queda juntos.
Lo bueno y lo malo.
Nos hemos dado el uno al otro
Todo lo que tenemos.
Y ambos sabemos, sin importar lo que haga después
Que siempre seré ese niño
Con las medias hecha un bollo
Y el tacho de basura en la esquina
:05 segundos en el reloj
Balón en mis manos.
5 … 4 … 3… 2… 1
Te amaré por siempre,
Kobe