Se espera su aprobación y disponibilidad para la segunda mitad de 2021. Podría ser especialmente útil para realizar pruebas masivas en empresas o aeropuertos
Científicos de la Universidad de Oxford desarrollaron una prueba rápida de COVID-19 capaz de identificar el coronavirus en menos de cinco minutos, informaron este jueves los investigadores.
Además, los responsables agregaron que dichos test podrían ser utilizados en pruebas masivas en lugares como aeropuertos y empresas.
La universidad británica dijo que esperaba comenzar el desarrollo del dispositivo de prueba a principios de 2021 para tenerlo aprobado y disponible seis meses después.
El método, según publicó Oxford en su página web, es capaz de diferenciar con alta precisión el SARS-CoV-2, el virus responsable de COVID-19, de muestras clínicas negativas, así como de otros patógenos respiratorios comunes como la influenza y la gripe estacional.Testeo rápido por COVID-19 en la Ciudad de México (REUTERS/Edgard Garrido)
“Nuestro método detecta rápidamente partículas virales intactas”, dijo el profesor Achilles Kapanidis, del Departamento de Física de Oxford, y agregó que esto significaba que la prueba sería “simple, extremadamente rápida y económica”.
Las pruebas rápidas de antígenos se consideran clave para implementar pruebas masivas y reabrir las economías mientras el coronavirus todavía está circulando, y las que ya están en uso son más rápidas y más baratas, pero menos precisas que las pruebas de PCR molecular existentes.
Siemens Healthineers anunció el miércoles el lanzamiento de un kit de prueba rápido de antígenos en Europa para detectar infecciones por coronavirus, pero advirtió que la industria podría tener dificultades para satisfacer un aumento en la demanda.
Nicolas Shiaelis, estudiante del doctorado de la Universidad de Oxford, explicó: “Nuestra prueba es mucho más rápida que otras tecnologías de diagnóstico existentes; el diagnóstico viral en menos de 5 minutos puede hacer realidad las pruebas masivas, proporcionando un medio proactivo para controlar los brotes virales”.Un trabajador de la Salud realiza un test rápido por COVID-19 en Soelden, Austria. REUTERS/Leonhard Foeger
Además, la doctora Nicole Robb, formalmente miembro de la Royal Society en la Universidad de Oxford y ahora en la Escuela de Medicina de Warwick, explicó que una de las mayores preocupaciones para los próximos meses de invierno son los efectos impredecibles de la co-circulación del SARS-CoV-2 con otras enfermedades respiratorias virales.
“Hemos demostrado que nuestro ensayo puede distinguir de manera confiable entre diferentes virus en muestras clínicas, un desarrollo que ofrece una ventaja crucial en la siguiente fase de la pandemia”, añadió.
Contagios en alza
El desarrollo de un test rápido de coronavirus como el de la Universidad de Oxford podría ayudar a los países a lidiar con la ola de rebrotes, que está golpeando con particular fuerza en Europa y afectando una vez más a la libre circulación de las personas.
Más de la mitad de los países de la Unión Europea (UE), al igual que el Reino Unido, están colocados en rojo en un nuevo mapa europeo sobre las restricciones de viaje publicado este jueves por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC).Gente con máscaras en el Aeropuerto de Fiumicino, en Roma, Italia (REUTERS/Guglielmo Mangiapane)
En este mapa propuesto el martes para armonizar mejor las recomendaciones, solo tres países de la UE o el Espacio Económico Europeo (Noruega, Finlandia y Grecia) están en su mayoría en verde, mientras que cinco (Italia, Chipre, Estonia, Lituania y Letonia) se encuentran principalmente en naranja.
Cinco países (Alemania, Austria, Suecia, Dinamarca e Islandia) no son objeto de código de color por la “falta de datos sobre los test”. El ECDC no hizo comentarios sobre esta ausencia.
Según la recomendación, al contrario de los que proceden de una zona verde, los viajeros provenientes de una zona naranja y roja (o gris) pueden ser objeto de medidas restrictivas a su llegada.
Un total de 16 países de la UE, entre ellos, Francia, España, Polonia y el Reino Unido, aparecen en rojo.